La gobernadora Rocío Nahle García afirmó que su administración no tenía conocimiento previo sobre la operación de una factoría clandestina detectada en el municipio de Coatzacoalcos, la cual está siendo investigada por la Fiscalía General de la República (FGR) por presunto manejo ilícito de hidrocarburos.
Durante conferencia de prensa, la mandataria estatal aclaró que el sitio no operaba como una refinería sino como una planta dedicada a la mezcla de aceites y productos derivados.
Subrayó que los permisos para actividades de refinación son competencia exclusiva de la Secretaría de Energía (Sener) y que hasta la fecha sólo se han autorizado dos en el actual gobierno federal: uno para la refinería de Dos Bocas y otro que fue rechazado.
“Esta instalación no contaba con autorización oficial y cualquier operación que se realice al margen de la ley debe ser investigada y sancionada conforme a derecho”, recalcó.
Nahle también confirmó que el caso es llevado por la FGR y que el gobierno estatal no participó en el operativo mediante el cual se aseguró la planta.
Resaltó la efectividad del despliegue federal al señalar que no hubo filtraciones, y comparó su actuación con la que realiza la Fiscalía General del Estado (FGE) en operativos locales.
Finalmente, la mandataria estatal reiteró que será respetuosa del curso de la investigación federal y que la información oficial deberá ser proporcionada por la Fiscalía General de la República conforme avancen las diligencias.
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